Desde la aparición de la Nueva Versión Internacional muchos mitos y misterios se dieron a conocer por diferentes medios. Se la trató como una herramienta de utilización mercadotecnia de conglomerados económicos, versión apóstata, incompleta y hasta se cuestionó a supuestos integrantes del Comité de Traducción que paradójicamente no formaron parte del mismo. Lo cierto es que muchos hablan desde el desconocimiento. Para despejar dudas Noti-Prensa habló con el Presidente de Bíblica para América Latina, el Dr. Esteban Fernández, quien con absoluta franqueza nos ayudó a aclarar algunas dudas sobre la Nueva Traducción Internacional, su relación con compañías cuyos propietarios están cuestionados y algunas otras inquietudes que fuimos recogiendo durante los últimos meses.
– Esteban ¡Bienvenido!… Muchas gracias por darnos su tiempo.
– ¡Gracias a ustedes por recurrir a nosotros para informarse e informar a los cristianos de todo el Continente!
– ¿Qué es Bíblica o como antes fue conocida la Sociedad Bíblica Internacional?
– Somos una editorial dedicada en exclusividad a la producción y distribución de la Biblia. La extensión del conocimiento de la Palabra de Dios como guía para que las personas conozcan a Jesús es nuestra misión. Las traducciones que producimos y que se hacen cada vez más populares, como en el caso de la Nueva Versión Internacional (que es una de las más recientes), marcan el paso de crecimiento que Bíblica ha tenido de manera sostenida. Tal vez la mayor expansión aún no se dio y estamos trabajando muy duro para conseguirlo. Sabemos que hay muchas personas que aún no conocen la Biblia y nuestra meta es llegar a donde esas personas están y brindarles las herramientas necesarias para abordar una vida basada en la relación íntima con Jesucristo. Somos concientes que hemos estado leyendo la Biblia sin tener en cuenta el contexto correc to. Tratando de hacer que la Biblia tenga pertinencia hoy, hemos soslayado el hecho ineludible de que se trata de un libro antiguo, escrito por escribas antiguos que hablaban idiomas extranjeros y vivían en una cultura muy diferente a la nuestra. La Biblia se escribió para nosotros, aunque no fue dirigida directamente a nosotros. No es un libro fácil para interactuar con él.
– Claro que no es un libro fácil, ahora… ¿considera que la Biblia se lee aisladamente?
– Quienes son lo suficientemente valientes para navegar la Biblia, por lo general piensan que la interacción es una disciplina privada. Tenemos «devocionales personales» o «momentos de quietud» en los que nos hacemos preguntas como «¿de que manera se aplica esto a mí?». Sin embargo, para los autores y receptores originales de la Biblia, la interacción colectiva o comunitaria era la regla, no la excepción.
– ajá… cosa que a veces no se da tan así en nuestros días ¿verdad?
– Exacto. Mira veamos a Esdras. Él leyó la ley a toda la comunidad. Las epístolas eran, en su mayoría, para que se leyeran en voz alta durante las reuniones de la iglesia.
La Biblia se escribió, en primer lugar, para el pueblo de Dios, es decir, para la comunidad. Por eso es que muchas veces hay ideas falaces acerca de la pertinencia y veracidad de una traducción por sobre otra. La comunidad teológica acepta la traducción mientras algunos iluminados sostienen la no pertinencia de las nuevas traducciones. Al enfrentarnos a estas presuposiciones, Bíblica tiene la oportunidad única que se presenta en una generación de idear una estrategia de interacción que sea más auténticamente bíblica, culturalmente convincente, y catalizadora de un crecimiento significativo de la iglesia.
– A ver si lo sigo… usted está diciendo que ¿la Biblia debe hablar el idioma de la gente?
– Sí. Déjame explicarte. La interacción sufre cuando leemos la Biblia en fragmentos, es decir, desconectada del todo, divorciada de su contexto y exiliada de la comunidad de fe. Las personas son menos propensas a convertirse en lectores de por vida y más a unirse al creciente número de occidentales que piensan que la Biblia es una fábula.
Por otro lado, cuando las personas experimentan las tres Ces de la auténtica interacción con la Biblia, es más probable que cultiven hábitos de lectura a largo plazo. Se tornan más generosas con su tiempo y dinero y sus iglesias experimentan un crecimiento conmensurable. En resumen, la gente deja de ser estudiante de la Biblia para convertirse en amante de la Biblia.
– Mmm… creo que sí entiendo, sin embargo para tenerlo claro ¿qué son las tres Ces? No estoy segura de saber a qué se refiere, por favor.
– Las tres Ces son: Complemento, Contexto y Comunidad. En primer lugar “Completo”. Necesitamos una visión panorámica de toda la Biblia. Nadie completa un rompecabezas sin consultar la ilustración que aparece en la caja. Las piezas individuales no tienen sentido si no se relacionan con la visión panorámica.
Del mismo modo, cuando Jesús se reveló a los discípulos en el camino a Emaús, no les recitó unos cuantos textos de prueba. Los condujo por toda la «historia grandiosa» de las Escrituras hebreas, de principio a fin. Jesús sabía que la gente necesitaba tener el panorama grande antes de que pudiera absorber los detalles más sutiles de la historia.
– Adquirir esa visión es sobre la literatura bíblica o qué?
– Adquirir una visión panorámica no significa primordialmente que sea acerca de la literatura bíblica, por lo menos no por su propio beneficio. La iglesia no necesita más concursantes de esgrimas bíblicas; necesitamos personas que conozcan la historia íntegra de la redención para que puedan descubrir el lugar que les corresponde en ella.
– Entiendo.
– En segundo lugar, el “Contexto”. Necesitamos leer la Biblia con ojos del siglo I. La Biblia se escribió para nosotros, pero no fue dirigida directamente a nosotros. Los receptores originales vivieron en un mundo en nada parecido al nuestro. Tenían sus propias lenguas, costumbres, ritos, políticas y mucho más.
Antes de que apliquemos las Escrituras a nuestras vidas, debemos identificar lo que significó para los lectores originales: los antiguos israelitas, los aldeanos palestinos y los súbditos del Imperio Romano.
Por ejemplo, la instrucción de Jesús de «dar al césar» (Mateo 22:21) no tiene sentido a menos que conozcamos el trasfondo de la ocupación romana. La moneda centro de la controversia tenía grabada la imagen de Tiberio César, junto con una inscripción que rendía adoración a su padre, el «divino Augusto». El mismo contexto revela que esta historia es acerca de algo mucho más que ser un buen ciudadano o cumplir con un deber cívico.
– Sin duda, hay un contexto histórico, cultural y socio-político a tener en cuenta.
– Sí, para entender el contexto se requiere una buena traducción: aquella que captura el equilibrio correcto entre forma y significado. Bíblica, con su lista inigualable de traducciones, está bien posicionada para ir a la vanguardia de la interacción contextualizada de la Biblia. Sin embargo, la sola traducción no es suficiente. A ninguna traducción puede exigírsele que comunique todos los detalles culturales. Mucho de este contexto se define más implícita que explícitamente; es un contexto que el lector original entendió, pero no así nosotros. Es por eso que la Biblia necesita comentarios, tal como el eunuco etíope necesitó que Felipe le comentara sobre el significado de lo que leía.
– Ok. Complemento, contexto y ahora viene comunidad ¿cierto?
– Así es. En tercer lugar, la “Comunidad”. Necesitamos experimentar la Biblia en comunidad con otros lectores. Los sistemas de recuperación y de pérdida de peso entienden lo que muchas iglesias pasan por alto. Los grandes desafíos ─romper una adicción, perder peso o interactuar con la Biblia─ tienen más probabilidades de éxito cuando el esfuerzo se hace en grupo.
Las comunidades brindan algo más que rendición de cuentas. Junto con las otras dos Ces de la interacción — el completo y el contexto— la comunidad es esencial para interpretar y aplicar la Biblia. De acuerdo con Pablo, es solamente «junto con todos los santos, que se puede comprender cuán ancho y largo, alto y profundo es el amor de Cristo» Efesios 3:18).
De otra manera, les hemos enseñado a individuos a leer solos y a preguntarse: «¿qué significado tiene este pasaje para mí?» Es una manera existencial de leer que hace del yo individual el punto de partida en la búsqueda de significado. Este acercamiento le debe más a Nietszche que a Jesús. Por otra parte, cuando las comunidades interactúan juntas con la Biblia, las iglesias crecen. El dar y el participar aumentan. Las personas se convierten en seguidoras más devotas de Jesucristo.
– El acercamiento con la realidad de los tiempos bíblicos es sumamente importante a la hora de estudiar las Escrituras. Pero el tema que nos llama es el de las traducciones, y en específico la NVI ¿Qué motivó a Bíblica a llevar a cabo el proyecto de traducción al español de la Nueva Traducción Internacional?
– Justamente encontrar una traducción que intentara acercarse más a la experiencia del siglo I de nuestra era. Una que hable en el idioma de hoy sobre lo que siempre Dios tuvo en su mente y corazón. Es tan simple como eso. Ser un medio que acerque a las personas con Jesucristo y juntos disfrutemos de la eternidad.
Agradecemos al Dr. Esteban Fernández por su tiempo quien nos dejó la promesa de seguir profundizando sobre estos temas de gran implicancia.
Sin lugar a dudas, poder dialogar acerca de las traducciones de la Biblia que existen hoy en día ayuda a entender la importancia de difundir la Palabra de Dios.
Edición Especial – Lizzie Sotola – Noti-Prensa
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