En este extraordinario libro, «Los hombres buenos también se enojan», Bill Perkins cuenta historias reales de hombres buenos que tienen problemas con su enojo. Hombres que se hacen daño a sí mismos y a otros. Hombres que gritan o se valen del sarcasmo y los comentarios hirientes. Hombres que se retraen en silencio y dejan de hablar. Hombres marcados por un padre iracundo e incluso hombres cuyo enojo es justificado, pero no saben cómo expresarlo. Dado que todos los hombres experimentan enojo, todos los hombres pueden descubrir —como lo hicieron estos hombres— que su verdadera identidad en Cristo los capacita para manejar su enojo de una manera saludable.
Basándose en años de consejería y trabajo con los hombres, el exitoso autor Bill Perkins brinda sus conocimientos y lleva a la verdad que hay detrás de esta emoción mal entendida. Qué es, de dónde viene, cómo la expresó Jesús y cómo los hombres pueden controlarla. Además, ofrece preguntas para el debate que le alentarán en el proceso de transformar un enojo negativo en un enojo positivo, que genere cambios y no duros conflictos difíciles de resolver. “Cuando escribí este libro, no tenía en mente a hombres como Bruce Banner, que se transforma en el Increíble Hulk cuando se enoja. Por el contrario, lo escribí para hombres comunes y corrientes que en ocasiones hieren a las personas cuando pierden los estribos. Es para hombres que quieren controlar su enojo de una manera piadosa” aseguró el autor.
Este libro tiene dos partes. En la primera, habla del enojo con el propósito de que el lector descubra algunas verdades fundamentales: qué es, de dónde proviene, cómo demostraba Jesús su enojo y por qué el autor está tan seguro de que el hombre nuevo y bueno dentro del lector puede aprender a controlarlo. La segunda parte del libro aborda seis asuntos cruciales a fin de entender, procesar y demostrar enojo de una manera piadosa. Los seis asuntos son: la identidad, el respeto, el control, el orgullo, el perdón y la bendición.
“Bill Perkins transmite sabiduría divina con humor, sinceridad y franqueza. Más importante aún, nos muestra que mediante la comprensión de nuestra nueva identidad en Cristo, podemos ser hombres poderosos, cuyo enojo sea usado como una fuerza para hacer el bien y no para destruir. ¡Algo realmente impactante!” afirmó el Dr. David Hawkins, director de The Marriage Recovery Center y autor de ¡Acabe con las adicciones cotidianas! y 9 errores graves que cometen las parejas.
Bill Perkins fue pastor principal por 24 años y es el fundador y director ejecutivo de Million Mighty Men. Además está graduado de la Universidad de Texas en Austin y del Seminario Teológico de Dallas. Es autor o ha colaborado en un total de 20 libros. Él y su esposa, Cindy, viven en West Linn, Oregon. Tienen tres hijos y dos nietos.
Para más información contacte:
Editorial Portavoz
Cathy Vila
PO BOX 2607
Grand Rapids, MI 49501
616-451-4775, ext 208
cathyv@portavoz.com
www.portavoz.com
Noelia Borja dice
Interesantísimo el tema ya que en realidad el enojo en sí no es pecado. «No se ponga el sol sobre tu enojo» es el mandamiento. La duración del mismo es un pecado ya. Además sería tan interesante conocer cómo manejarlopara no crear conflicto con otras personas y así embolvernos en situaciones desagradables u hostiles