Dante Gebel cuenta detalles acerca del próximo Superclásico en septiembre en la ciudad de La Plata en una entrevista exclusiva que diera a Altar7.com.
-Si te pido alguna primicia que todavía no hayas dado con respecto al Superclásico, ¿ya te estoy pidiendo mucho?
-La presencia de Dios va a ser tan palpable que hará que esas noches sean inolvidables. Hace una semana le decía a mi esposa: “Quienes no me conocen creerán que hacemos otro Superclásico sólo porque me gusta hacerlo, no saben la presión financiera, espiritual y personal que se vive ante un evento así”. Si hacemos esta cruzada es porque tengo un mensaje para nuestros jóvenes y quiero decírselos de parte de Dios, sincera y frontalmente.
-¿Por qué en esta ocasión serán dos noches?
-Porque así iba a ser si lo hacíamos en River, Boca o Vélez. La convocatoria siempre va creciendo y las dos noches nos permiten variar y predicar dos mensajes diferentes en vez de uno. Además le damos la oportunidad a que todos los que no puedan ingresar un día, tengan la opción del día siguiente. Me hubiese gustado hacer tres noches si tuviéramos el presupuesto.
-Contanos un poco acerca de lo que serán estas dos noches únicas…
-No hay mucho para adelantar, los jóvenes que han estado en alguno de los Superclásicos saben de qué se trata y lo que Dios hace en esas noches. No es sólo un espectáculo, es una cruzada de santidad y de evangelismo donde se predica el mensaje de nuestro Señor Jesucristo. Como valor agregado tratamos que tenga la mejor puesta y que tenga el marco de un show internacional para llegar a los jóvenes, pero lo medular es la Palabra, siempre lo ha sido y lo será.
-¿Podés adelantar quiénes son los otros invitados?
-Al Superclásico nadie va por los invitados ni queremos que vayan por ellos, no es un concierto ni un festival de bandas o cantantes. Es una cruzada donde lo único importante es la predicación de la Palabra. Todo lo demás, incluyendo a los invitados, es sólo un condimento extra, y los jóvenes lo saben. Pero te aseguro que va a estar increíble, desde el primer minuto del comienzo en adelante.
-En Argentina este es un año electoral y es notable y notorio el apoyo del gobernador Daniel Scioli al Superclásico ¿No tenés temor de quedar “pegado” a Scioli o al oficialismo?
-Por supuesto que no. Hemos hecho cruzadas durante los gobiernos de Menem, De la Rúa, y Kirchner (de hecho en el 98´ gestionamos la reunión del obelisco en relación directa al gobierno de aquel entonces, y yo tenía un programa en el canal del Estado, el viejo ATC). Esta es la primera vez que un gobernador nos brinda un apoyo incondicional. Nos ha cedido el estadio, la logística, los permisos y fue él mismo quien me dijo: “Necesito que le hables a los jóvenes argentinos, hay mucha falta de liderazgo, hace falta que escuchen algo diferente”. En el último River dije: “Gobernantes, es hora que dejen de mirar para otro lado y paguen eventos como éste”, así que el gobernador abra las puertas de la provincia, me parece que ya es un buen comienzo y el resultado a tantas oraciones. Sea que lo haga con motivo del año electoral o no, te puedo ase gurar que no estamos dispuestos a dejar pasar una oportunidad así. Por otra parte, ya nos conocíamos con Daniel Scioli desde mucho antes; cuando él era vicepresidente coincidimos en varias reuniones y estuvimos cenando en su casa. Nos conocemos desde hace mucho tiempo, nos tenemos un gran cariño y siempre estoy orando por él y su familia.
-En el año 98´ en el obelisco se tenía prohibido pasar imágenes para la televisión de la cruzada, y en este año la transmisión será en vivo para el país y por Enlace para el resto de los países latinos. ¿A qué se debe esta apertura actual al evangelio?
-Supongo que son diferentes tiempos que vive la Iglesia. Por eso es importante que los gobernadores o los presidentes abran las puertas de una nación. Nosotros hicimos eventos con todo el oficialismo en contra y con la bajada de línea de ciertos sectores para que ni siquiera apareciera un epígrafe en los diarios; aún así, los eventos eran de enorme bendición para los que asistían. Esta vez, Dios mediante, estamos orando para que el mensaje llegue a todo el país y el resto del continente.
-Sé que te hicieron esta pregunta en reiteradas ocasiones pero siempre el público se renueva y además todo será gratis para los asistentes. ¿Cómo se financia el Superclásico de la Juventud?
-Siempre es un desafío de fe, desde hace mas de quince años. Las historias de cómo Dios nos da el dinero para la cruzada son increíbles. Hemos decidido mantenernos en no cobrar entrada ni levantar ofrendas en el Superclásico, dado que es una cruzada evangelística y no quiero que se malinterprete el objetivo o se dude de la motivación del evento. Muchas veces no tenemos el dinero hasta pocos días antes. Esta vez, con nuestro propio ministerio pagamos gran parte de la cruzada, los miembros de la iglesia hispana de la Catedral de Cristal también han aportado financieramente y algunos hombres de negocios que creen en la visión de predicar el evangelio a la juventud (no son sponsors, ya que no promocionamos ninguna empresa) hacen donaciones. La inversión es muy grande, (esta vez llevamos invertido cerca del millón de dólares solo en producción) y nuestra fe también. He contado cada uno de los milagros financieros en mis libros. Es milagroso como se logra pagar este tipo de eventos sin obtener ninguna remuneración o ganancia.
-Para finalizar, te pido que le des a los lectores razones por las cuales el Superclásico de la Juventud es una cita ineludible para las familias que integran a la Iglesia en toda la Argentina
-Cuando tenía unos veintitantos años, renté por primera vez el estadio Vélez, cuando no me conocía casi nadie y todos me pronosticaban que iba a fracasar. Recuerdo orar todas las noches preguntándole al Señor qué debía hacer, ya que si estaba equivocado estaba dispuesto a anular el contrato y no hacer nada. Una de esas noches, el Señor me dijo claramente: “Sólo háblales de mí, dame la gloria y yo los traeré del norte y del sur, del este y del oeste”. Pocos meses después, el estadio estaba colmado. A través de todos estos años, esas mismas palabras me han dado paz y tranquilidad antes de un evento de esta magnitud. No hay mucho más que pueda decir acerca del Superclásico de la Juventud, sólo que estoy seguro que el Señor traerá a quienes deban estar desde cada rincón del país. El resto será historia.
Por Exequiel Campos (Fragmento de la nota publicada en Altar7.com)
Más información en www.Elsuperclasico.org
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